Hoy se celebra el patrón de la psicología en España, Juan Huarte de San Juan, un día muy especial para mí desde el día que decidí estudiar psicología y un día festivo para todos los psicólogos, por eso quiero aprovechar para felicitar este día a todos mis compañeros y colegas de profesión.
Ya sabes que me encantan los balances, y por supuesto este día casi de forma involuntaria mi cerebro se ha programado para hacer uno de mi sueño, de la decisión de estudiar psicología que tomé casi en mi infancia y que ví cumplida en 2003 cuando me matriculé en la Universidad de Granada.
Han pasado 13 años desde entonces, casi 8 desde que terminé la licenciatura y puedo decir que estoy en el camino en el que quiero estar, que mi sueño cuando decidí estudiar psicología era este, trabajar en lo que me gusta, sin presiones y sobre todo dandole a mis pacientes la calidad y el tiempo necesario y viéndolos como personas y no como números.
¿Porqué digo esto?
Con la Salud Mental de la seguridad social colapsada mi objetivo para con mis clientes es garantizar un servicio de calidad y eso implica la preparación exhaustiva de las sesiones y que la misma tenga una duración mínima de 1 hora.
Tengo la confianza de que desde el gobierno se den cuenta de la necesidad de mejorar la atención en salud mental ya que la demanda es extrema.
Un paciente no puede avanzar si se le cita 20 minutos cada 6 meses, te aseguro que he tenido pacientes que me hablan de estas cifras y conozco a compañeros que las certifican.
Es tremendo porque esto implica que las familias con pocos recursos se vean obligadas a coger eso o nada, y también implica que en atención primaria se saturen las consultas sobre estos temas, y que el tratamiento de obligada elección sea la vía farmacológica, es una autentica pena.
España está sobremedicada, y lo está por la escasez de recursos que se dedican a la atención psicológica, no es normal que sea el país con tasa de contratación de psicólogos más baja de Europa, ni tampoco lo es que en la sanidad pública haya 4 psicólogos por cada 100.000 habitantes o que haya ¡1 plaza PIR por cada 31 candidato!
Es una aberración
Llevo ejerciendo mi profesión desde 2009 y desde entonces me he encontrado con muchas situaciones difíciles de entender, es curioso pero los psicólogos aun hoy somos vistos como «loqueros» y aún hoy existe ese rechazo, tabú o reticencia hacia nuestra figura.
La única explicación que se me ocurre con respecto a esto es que la dolencia de las personas que necesitan asistencia psicológica no se ve, no se toca, no está localizado en ningún lugar que pueda verse mediante radiografía, imagen por
resonancia magnética, ecografía… y por tanto no es factible que pueda “enfermar” y que ese “enfermar” sea tratable.
Vivimos en una sociedad hipermedicalizada e hipermedicamentada
Eso nos hace que en muchas ocasiones busquemos soluciones a determinados problemas donde no los vamos a encontrar y directamente ignoremos lo «sencillo», lo «fácil»: escucharnos a nosotros mismos, escuchar lo que necesitamos.
Recuerdo la conversación con una señora que me comentaba que ella considera que los psicólogos somos
los “sanadores de dentro” no sabía decirme exactamente que era ese “dentro”, si hablaba de alma, de mente…
Ella lo describía como esa voz que escucha, que conoce en su interior desde que nació y que a veces se equivoca y la hace sentir mal.
Por supuesto no hablaba de alucinaciones auditivas, hablaba de su “yo interior” de ese nosotros que solo nosotros conocemos, que lleva a nuestro cuerpo por la vida tomando el control y las decisiones, haciéndonos sentir de tal o tal otra forma y que no siempre acierta y no siempre nos hace sentir bien.
Tras pensarlo mucho comprendí que tenía razón, que realmente un psicólogo se ocupa de “guiar” esa voz con las estrategias y recursos que están a nuestro alcance y que a alguien algún día se le ocurrió llamarle terapias.
Tengo la firme confianza de que en un futuro no muy lejano la asistencia psicológica en la sanidad pública será mejor, también tengo la enorme seguridad de que la figura del psicólogo será entendida y valorada como merece.
Lo reconozco, tengo envidia, una envidia sana por supuesto, por la importancia de la figura del psicólogo en otros países del mundo, sobre todo al otro lado del Atlántico.
El objetivo de este blog es acercar esa figura a todos, proponer los recursos que están a mi alcance como profesional y ofrecer información útil y de calidad para mejorar la salud y el bienestar emocional y por supuesto ofrecer mi servicio de manera individualizada con las herramientas más eficaces.
Ahora que conoces un poquito más sobre mi sueño echo realidad de estudiar psicología, ¿te apetece unirte a esta gran familia de deemocionesymás?
La verdad es que hay gente que piensa que si visita a un psicólogo es porqué está mal de la cabeza. Esto no es así. La vida es como la fotografía. Todo depende de la perspectiva con que se miren las cosas. A veces los seres humanos necesitamos que nos digan desde que perspectiva hay que mirar las cosas para verlas con claridad. Muchas gracias por tus aportes y que tengas mucha suerte con tu profesión.
Un abrzo.
Muchisimas gracias Santi!
Me gusta mucho la metáfora que has utilizado.
Ocurre que aun no estamos acostumbrados a eso del dolor emocional pero estoy segura de que eso está cambiando, desde luego esa es mi mayor intención con deemocionesymas.
Un abrazo
Muy valiente, Andrea! Muy claro y estoy de acuerdo contigo: la sociedad española está sobremedicada y la mayoría no quiere cambiar: es más fácil tomar pastillas, sin esfuerzo, y pensar que así se puede curar, sin esfuerzo. Llevamos mucho tiempo de retraso y la gente todavía piensa que es mejor lo malo conocido que lo bueno por conocer. Yo tengo esperanza en la juventud y en que creceremos hacia algo mejor.
Hola Beatriz!
A ver a ver que podemos hacer jeje, yo no pierdo la esperanza con nadie, no me doy por vencida porque no creo que nadie merezca seguir viviendo en la ignorancia que le lleva al sufrimiento.
Un abrazo